En toda buena carrera hay altibajos. Ni siquiera los mejores entrenadores de fútbol pueden llevar siempre a su equipo al éxito, por muy buenos que sean los jugadores de su plantilla.

Sin embargo, hay ciertas cosas que un entrenador puede hacer para preparar a su equipo lo mejor posible para los próximos partidos y aumentar en gran medida las posibilidades de ganar.

Así, nuestro consejo es que intente lo siguiente:

1. 1. Cambiar y adaptar la formación. Investiga si tendría sentido utilizar diferentes jugadores en tu alineación inicial. Puede que quieras retrasar a un jugador estrella ofensivo por otro más defensivo si la configuración adecuada contra tu rival necesita una concentración defensiva.

2. Asegúrate de que tus jugadores estén totalmente descansados y de que su moral sea alta. Cuanto mejor sea el estado de ánimo de tus jugadores, mejor rendirán sobre el terreno de juego. En cambio, si están demasiado cansados, no podrán jugar con su máximo potencial.

3. 3. Adáptate a las acciones de tu adversario. Si ves que está haciendo cambios de última hora para contrarrestar tu alineación, puedes intervenir y hacer tú mismo un cambio de última hora.

4. Intenta evitar colocar a jugadores en posiciones en las que no se sientan cómodos jugando. Un jugador defensivo puede no ser adecuado para una posición ofensiva. Verás un signo de exclamación al lado del jugador en la formación de la plantilla cuando esto ocurra. Una roja significa una gran penalización en su rendimiento.

5. El trabajo en equipo es importante. Poner en el campo a jugadores de diferentes Estilos, edades similares o de la misma nacionalidad y estimular el potencial de cooperación entre ellos puede mejorar eficazmente la efectividad del equipo.

No obstante, ten en cuenta que no existe una "regla de oro" en lo que respecta a la táctica. Una determinada formación puede no ser siempre la estrategia ganadora. La simulación de partidos en Top Football Manager tiene en cuenta muchos factores y datos diferentes. Todas tus configuraciones se medirán con las configuraciones de tu oponente. Esta es la razón por la que una formación y alineación que aseguró una victoria en un partido anterior puede resultar en una derrota en el siguiente partido.